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Obras completas de Ireneo Paz. Parte III: obra periodística

Ángel Gilberto Adame

Año

1861

Lugares

Estados Unidos de América
México

Personas

Paz, Ireneo

Tipología

Investigación histórica

Temas

El origen y la familia

Lustros

1900-1904
1905-1909
1910-1914

 

I. El Gorro Frigio (¿1857?)


Fecha de publicación: 1857 (?)
Lugar: Colima (?)

Responsable: Ireneo Paz


En su ensayo "Algunas Campañas. Memorias de Ireneo Paz" Napoleón Rodríguez hace referencia a un homenaje en honor de Paz realizado en 1924. En este, el periodista afirmó que su primer periódico, llamado "El Gorro Frigio", salió de imprenta cuando él tenía quince años y tenía por objeto apoyar el Plan de Ayutla. Sin embargo, la verdadera fecha de esta publicación se mantiene incierta, pues la única referencia a un periódico con ese nombre es de 1857.  


II. El Día (1861) 

Fecha de publicación: 1861

Periodicidad: semanal

Lugar: Jalisco

Responsable: Ireneo Paz

Impresión: José M. Brambila

 

Teóricamente, la publicación corrió a cargo de José M. Brambila, pero en realidad se ocupó de ella Ireneo Paz, responsable de la redacción. Constaba de cuatro páginas a doble columna.

     Celia del Palacio Montiel menciona El Día

A diferencia de la Revolución de 1910, la Guerra de Tres Años sí tocó profundamente a Guadalajara. Varias veces sitiada, tanto por conservadores como por liberales, parcialmente destruida en más de una ocasión, poco tiempo había en Guadalajara para vida cultural. Las publicaciones de ese periodo salieron de las filas mismas de los liberales y conservadores. Desde estos órganos, más de polémica que de información, se libraron acerbas batallas entre ambos bandos. 

Ejemplos de ello son La Revolución (1855), de Miguel Cruz-Aedo, Urbano Gómez y José María Vigil, periódico que a partir de 1856 se convirtió, bajo la dirección de este último, en El País, longevo trisemanario que seguiría publicándose hasta 1862; El Boletín del Ejército Republicano (1855), de José María Vigil, El Nacional (1855), órgano de los liberales puros, así como El Águila Roja (1856); asimismo, los órganos oficiales: Boletín del Estado de Jalisco (1856); Boletín de la Primera División del Ejército Federal (1859); Boletín de las Leyes de la Federación y del Estado (1860) y La Sombra de Cruz-Aedo (1861); El Día, redactado por Ireneo Paz en 1861; El 93 del mismo año 1861, ‘hoja periódica de la Montaña Terrorista’; y El Espejo, también de ese año, el cual defendía a la Constitución de 1857. [1]


III. El Voto del Pueblo (1862) 

Fecha de publicación: marzo - octubre

LugarGuadalajara

Responsable: Julio García Peña

Se editó antes de la entrada del ejército francés a Jalisco. Sus notas principales se reprodujeron en la Ciudad de México en El Siglo Diez y Nueve y en El Constitucional. Además del responsable y Paz, colaboró en sus páginas Alfonso Lancaster Jones.

     El 2 de abril apareció una nota que corresponde al estilo de Paz:

Hace algún tiempo que los nacionales que ocupan el antiguo convento de San Francisco, horadando en diferentes puntos, guiados por el sonido hueco que dan los pavimentos al herirlos, han descubierto varios subterráneos, cuyas paredes en forma de gavetas, servían para depositar cadáveres, contraviniendo de esta manera las disposiciones de salubridad, que prevenían no enterrar cadáveres sino en los cementerios públicos colocados extramuros de la ciudad. [2]

Otra nota corresponde a la postura política del diario:

El silencio del partido conservador en estos momentos puede traducirse de una manera desfavorable para él mismo [...]. La abominable conducta de esos malos mexicanos que han escandalizado a la civilización, reclama un castigo severo de parte de la nación mexicana, que con heroicos sacrificios ha conquistado su independencia [...]. Creemos que en estos momentos solemnes de la patria deben dar una prueba de que son dignos hijos de Hidalgo y Morelos, haciendo una protesta formal contra los que tratan de arrebatarnos nuestra cara independencia [...]. Nosotros escitamos [sic] el patriotismo de los conservadores de buena fe y a los ministros del culto, a que manifiesten su opinión de la manera que antes hemos dicho. [...] Estos son los deseos del club "Ocampo", de quien somos órgano: dicha asociación trabaja por cuantos medios están a su alcance, para conservar incólumes el honor y la independencia de nuestra querida patria, y las inapreciables conquistas de nuestra revolución reformista. [3]


IV. Sancho Panza (1863)

Fecha de publicación: octubre - diciembre

Lugar: Guadalajara


La Sociedad, 19 de octubre de 1863

En 1863, Ireneo editó este "periódico festivo" que “con la mayor facilidad ganó terreno en las masas”. La publicación pintó la invasión  con humor negro, con el propósito de provocar el repudio de la población hacia ella. Asimismo, censuró los abusos de sus correligionarios que “entibiaban el espíritu público”, haciendo especial alusión a Antonio Rojas. Dichos comentarios le valieron a Paz prisión domiciliaria, durante la cual su residencia estuvo sitiada por los galeanos. [4]


V. La Aurora del Progreso, periódico oficial del estado de Colima (1864)

Fecha de publicación: 1864

Lugar: Colima

Responsables: Crescencio Orozco, Antógenes Andrade e Ireneo Paz

Impresión: Imprenta de L. Orozco, calle de los Almacenes, número 30

El Siglo Diez y Nueve señaló que el nombre de esta publicación se estableció desde que lo redactaban José María Valencia y M. Orozco. La Aurora del Progreso adoptó el siguiente epígrafe: "En el cumplimiento a las leyes y a las autoridades que de ellas emanan, está el salvamento de nuestra Constitución e Independencia". [5] Algunos de sus editoriales fueron "Perfidia francesa" y "Objetos de buena presa", publicado a finales de enero de 1864, cuando el Gobierno de Colima nombró como redactor en jefe de esta publicación a Ireneo Paz. Luego publicó "La Iglesia del Carmen de Guadalajara derribada por los franceses. La condición de los traidores empeora con la conquista", "Los conservadores de California", "Las últimas noticias extranjeras", "Documento diplomático", "La protesta de los Obispos", "Los notables de Guadalajara" y "Armas francesas". También apareció el poema de Ireneo "Despedida de Guadalajara". [6]


VI. El Pensamiento Público (1864)

Fecha de publicación: abril – octubre

Periodicidad: semanal

Lugar: Colima

Entre los objetivos de la publicación estaba "enardecer a la juventud contra el imperio". Se imprimían ochocientos ejemplares a la semana, los cuales apenas bastaban para la demanda que este semanario tenía. Ireneo asentó que colaboraba en el periódico para defender la libertad. [7] Aunque ya participaba como redactor, no fue sino hasta el 23 de octubre que tuvo un número completo a su cargo. Una de sus editoriales fue "La cuestión mexicana en Estados Unidos". [8] Tras la partida de Paz, la revista quedó en manos de los hermanos Juan y Ramón Valle. Además de éstos e Ireneo, publicaron en sus páginas José Pamplona, Fermín González Trejo y mucho otros que, al hacerlo, corrían peligro de ser encarcelados. Es el caso del relato "Garantías del Imperio" en el que son detenidos cuatro individuos por leer la poesía de Juan Valle. En ella se decía: "Guerra al invasor, guerra al traidor". [9] 


VII. La Independencia (1864)

Fecha de publicación: 13 de agosto - 29 de octubre

Periodicidad: bisemanal

Lugar: Colima

Responsables: Ireneo Paz, Filomeno Medina, Fermín G. Castro y Francisco E. Trejo

Esta publicación se definía como el "periódico del pueblo". Algunas de las colaboraciones de Paz fueron "El pasado, el presente y el porvenir", "Gacetilla" (daba noticias sobre la guerra), "La presidencia", "El amor de los traidores", "El imperio por dentro", "Ridiculus Mus", "Los moderados y el Imperio", "La proclama del gobierno de Jalisco", "Fe en el porvenir", así como los discursos del 5 de mayo y 16 de septiembre. [10]


VIII. El Payaso (1865-1866) 

Fecha de publicación: 2 de julio de 1865 – 17 de junio de 1866; 7 de septiembre-15 octubre 

Periodicidad: bisemanal

Lugar: Jalisco

Responsable: Eulogio Benítez

Impresión: Tipografía de José M. Brambila   

 

Según relató Ireneo Paz, en su época, el periodismo en Guadalajara era incipiente. Por esa razón no había publicaciones que superaran los trescientos ejemplares. En la misma línea humorística que Sancho Panza, su antecedente directo, El Payaso inició su tiraje el 2 de junio de 1865. Circuló dos veces por semana: los jueves y los domingos. Se imprimió en la Tipografía de Brambila, a cargo de M. Cariel. El editor responsable fue Eulogio Benítez. Bajo el título de la publicación, se leía: “Periódico bullicioso, satírico, sentimental, burlesco, demagogo y endemoniado, que ha de hablar hasta por los codos”.

     Fue el medio tapatío más importante durante los años de la Intervención y el Imperio. [11] Esto dice Napoleón Rodríguez:

Se dice que su publicación fue todo un acontecimiento ya que sus ediciones se agotaron rápidamente y Maximiliano, que tenía fama de condescender con las ideas liberales, se interesó rápidamente en la jocosa serie, solicitando para ello y por conducto del delegado imperial Jesús López Portillo, una colección de la misma. El nombre aludía a la farsa que se estaba llevando a cabo bajo los designios de Napoleón III, que impuso un imperio ridículo. [12]

    

IX. El Noticioso (1866)

Fecha de publicación: 24 de octubre – 21 de noviembre

Periodicidad: trisemanal

Lugar: Jalisco

Responsable: Luis Anguiano

Impresión: Tipografía de José M. Brambila

    

El Noticioso surgió el 24 de octubre de 1866 en Guadalajara mientras Ireneo Paz esperaba una oportunidad de ir a Colima. La publicación sólo incluía noticias que llegaban de fuera. La relevancia de este periódico no se dio en función de las controversias que suscitara su contenido, sino que obedeció a su intempestivo cierre luego de la visita de la actriz Ángela Peralta a Guadalajara, cuyas actuaciones causaron en el público mucho júbilo, especialmente en don Ireneo, quien, después de la última función y a petición de Eugenio Nicol, esposo de la cantante, le dedicó unas estrofas que exaltaron aún más al público. La que más revuelo causó fue la siguiente: “¡Ah! ¡De tantas alegrías,/ Nos quedará la memoria!.../ Hoy las penas son impías…/ Tal vez en mejores días/ Amaremos más tu gloria”. El mensaje fue interpretado como una afrenta contra las autoridades imperiales. Por si fuera poco, luego de que Ireneo Paz huyera de la algazara, ésta llegó hasta su casa clamando por él. Acto seguido, sospechando su suerte, Paz salió a su balcón y pronunció una breve alocución que exhortaba a todos a pelear por la libertad. Las consecuencias de este desafío no se hicieron esperar y, por orden del comisario imperial, El Noticioso cerró sus puertas. Ante la desavenencia, Ireneo mandó fijar unas tiras en los lugares públicos dando a conocer la clausura de su periódico: “Por orden del general don Ignacio Gutiérrez se suspende la publicación de El Noticioso. Se despide de sus lectores hasta mejores días”. [13]

    

X. El Diablillo Colorado (1867)

Fecha de publicación: 22 de septiembre - 14 de diciembre

Periodicidad: bisemanal

Lugar: Mazatlán

Impresión: Miguel Retes

Fue un periódico bisemanal publicado en Mazatlán para combatir la administración del gobernador sinaloense Domingo Rubí; sin embargo, sirvió también para lanzar la candidatura de Porfirio Díaz a la presidencia de la República. “De género jocoso, promovía el apoyo al candidato de su elección, el general Ángel Martínez. Paz se definió abiertamente como opositor a la tercera reelección del presidente Juárez y su total adhesión a la candidatura de Porfirio Díaz a la presidencia de la República y la de Vicente Riva Palacio a la de la Suprema Corte de Justicia”. [14]

     En sus páginas figuraron gacetillas políticas, diálogos satíricos y composiciones literarias. Continuó la tradición iniciada durante la guerra de Independencia de un periodismo difusor de ideas o censor de causas, político y polémico, cuyo tono se mantendría hasta entrado el siglo XX. [15]

     En una carta de Ireneo Paz a Apolonio Angulo, publicada el 19 de junio de 1868 en El Siglo Diez y Nueve, se lee: 

Redacté tres periódicos en los intervalos que dejaron libre mis ocupaciones: La PalancaEl Diablillo coloradoEl Boletín popular que se vea número por número y se encontrará que exponía mis juicios con la mayor independencia, siempre franco y siempre inexorable. Esto me hizo odioso para mis enemigos pues era un método enteramente nuevo para ellos. Nadie les había hecho oír toda la verdad.

En palabras de Napoleón Rodríguez: “Se dice que fue recibido por el público con verdadero entusiasmo, ya que sus ediciones se agotaban y ni el mismo Paz lo pudo coleccionar; el número de sus publicaciones llegó a cincuenta”. [16]

 

XI. La Palanca de Occidente (1867)

Fecha de publicación: 23 de septiembre - ¿?

Lugar: Mazatlán

De acuerdo con El Constitucional, La Palanca de Occidente comenzó a publicarse el 23 de septiembre de 1867. Según Ireneo:

En el primer número postuló este periódico a D. Benito Juárez para Presidente de la República, pero en el segundo retiró tal postulación en virtud del disgusto que causó al partido liberal la convocatoria anticonstitucional para las elecciones generales. [Así] fue el primer periódico de la República que postuló al General Porfirio Díaz para Presidente de la República y al General Vicente Riva Palacio para Presidente de la Suprema Corte de Justcia. [17]

El periódico tenía “claros propósitos electorales, pretendía alentar a la población de Sinaloa para que presentara candidaturas a la gubernatura”. [18] En una nota publicada en noviembre de ese año, el periódico manifestó su carácter anticlerical:

Parece que comienza a agitarse no sólo en el estado sino en todo el país, escudado por las franquicias que contra la Constitución se lo han otorgado en la Convocatoria. ¡El cielo nos guarde que el buitre de las cien cabezas vuelva a meter alguna de ellas entre nosotros! ¡Dios no permitirá que volvamos a caer en sus garras, después que tanto sufrimos en los años de su nefanda dominación!

XII. San Baltasar (1869-1870) 

Fecha de publicación: 17 de octubre de 1869 - 16 de enero de 1870

Periodicidad: bisemanal

Lugar: Ciudad de México

Responsable: Juan Muñoz Silva, J. Briseño y J. F. Serrano

Impresión: Imprenta de T. F. Neve, callejón de Santa Clara, número 9

Una vez más, Ireneo participó en un periódico "chusco, amante de decir bromas y groserías, […] y con caricaturas". Tras establecerse definitivamente en la capital, Ireneo conoció a Juan N. Mirafuentes, quien lo invitó a colaborar en esta publicación cuyos ejemplares constaban de cuatro páginas impresas a tres columnas, con paginación independiente, además de una caricatura en cada número. El rotativo se distribuía en la esquina de los Portales de Agustinos y Mercaderes; en las alacenas de la esquina de Plateros y Portales; en el cruce de calles de la Aurora; en la botica de Porta-Coeli; así como en la Agencia de la Ilustración Americana, primera de San Francisco número 3.


XIII. El Padre Cobos (1869-1880) 


Primera época

Fecha de publicación: 21 de febrero – 20 de julio de 1869

Periodicidad: bisemanal

Lugar: Ciudad de México

Responsable: J. R. Torres

Impresión: Imprenta de Vicente G. Torres, calle de San Juan de Letrán, número 3


Segunda época

Fecha de publicación: 1 de enero de 1871 – 17 de septiembre de 1871

Periodicidad: bisemanal

Lugar: Ciudad de México

Responsable: J. R. Torres

Impresión: Imprenta de Vicente G. Torres, calle de San Juan de Letrán, número 3


Tercera época

Fecha de publicación: 2 de enero de 1873 – 9 de julio de 1876

Periodicidad: bisemanal

Lugar: Ciudad de México

Responsable: J. R. Torres

Impresión: Tipografía de Rivera, Hijo y Comp., calle de Coliseo viejo, bajos de la gran sociedad


Cuarta época

Fecha de publicación: 3 de enero de 1880 - 27 de noviembre de 1880

Lugar: Ciudad de México

Responsable: Ireneo Paz

Impresión: Tipografía de Ireneo Paz, calle de Escalerillas, número 7

   

El Padre Cobos se definía a sí mismo como un “periódico alegre, campechano y amante de decir indirectas… aunque sean directas” . Su primera etapa de publicación fue del 21 de febrero al 20 de junio de 1869, mientras Ireneo Paz estaba encarcelado en la Ciudad de México. La imprenta encargada de su publicación fue la de Vicente García Torres, ubicada en el número 3 de la calle de San Juan de Letrán. El periódico circuló bajo el anonimato del autor durante algunos meses, pero, cuando Paz fue descubierto, tuvo que dejar de editarlo a cambio de su libertad. [19]

     Sobre la detención de Ireneo se dijo: 

Se ha estrechado la prisión del redactor de este periódico, a quien se ha encerrado en compañía de otra persona en un cuarto estrecho, sin luz y sin aire. Ayer no se le permitió recibir a su anciana madre, que tuvo que retirarse de la Diputación vertiendo lágrimas. Estos son pequeños medios de martirizar contra los cuales no hay más antídoto que la paciencia. [20] 

La premisa en los primeros números de la publicación era la siguiente:

Empezamos por encomendarnos con alma, vida y corazón a lo más fuerte que hay, ha habido y habrá en todos los alrededores, esto es, al primer ministro, al alter ego del Sr. Presidente, para que salgamos con felicidad en nuestra tarea de escribir un periódico para el pueblo en son de verdad, con el fin único de hacerle bien y buena obra, refiriéndole entre probadita y probadita de sal y de pimiento, todo lo que está por pasar, si Dios no lo remedia, con menoscabo de los derechos de ese mismo pueblo a quien siempre se invoca y de quien se hace maldito el caso. 

Aparecía dos veces a la semana: jueves y domingos. A partir de junio contó con ilustraciones de Alejandro Casarín. [21] Fue concebido para enfrentar a Lerdo de Tejada y, según Napoleón Rodríguez, el “nombre de El Padre Cobos fue una clara imitación del humorismo español representado por un clérigo regordete y glotón —recuérdese que Lerdo fue ‘jesuita’ y amante de la buena mesa— en la caricatura de referencia se manifestaba su hondo sentido anticlerical”. [22]

     El nombre de la publicación no es original. Durante el bienio progresista en Madrid que fue de 1854 a 1856, se publicó un semanario satírico muy popular con el mimo nombre, el cual “era famoso por sus críticas punzantes y explícitas, muy atrevidas para su tiempo”. También se publicó un Padre Cobos en Santiago de Chile en 1875.

     El periódico se estableció en diferentes direcciones a lo largo de sus épocas. En un principio estuvo en el número 6 de la segunda calle de Vanegas; por su parte, la imprenta se encontraba en San Juan de Letrán número 3; la empresa Tipografía Rivera —que trabaja para el periódico— se hallaba en la calle del Coliseo viejo. También los puntos del suscripción fueron cambiando y aumentando.

     El personaje del padre Cobos se le atribuye al español Juan Eugenio Hartzenbusch, autor de una fábula así titulada: 

Hartzenbusch escribió una graciosa fábula titulada Las indirectas del Padre Cobos, cuya acción transcurre en un convento andaluz cuyo prior, molesto por las numerosas visitas que acudían al convento, encargó al portero, apellidado Cobos, que hiciera ver con mucho tacto a los inoportunos visitantes que debían espaciar más sus visitas al convento. Así lo hizo, con sorprendente y exitoso resultado. Cuando el prior le preguntó qué indirectas había empleado con los visitantes, Cobos respondió así:

—Cada quisque llevó su indirectilla y huyó de mí la incómoda cuadrilla.

—Cuénteme las discretas expresiones cuya virtud a la razón los trajo.
—Les dije la verdad: sois un atajo de tunos, de chismosos y de hambrones.
—¿A eso llamas indirectas, en efecto?
—Yo en ellas nunca fui más circunspecto.
—Pues, hermano, mentiras o verdades, sus indirectas son atrocidades. [23]    


XIV. La Nueva Era (1870)

Fecha de publicación: 13 de enero - 13 de febrero

Periodicidad: bisemanal

Lugar: San Luis Potosí

Responsable: Ireneo Paz

Impresión: Imprenta del Colegio Polimático, en la calle del Coliseo

El lema de esta publicación era el siguiente: “Abajo Juárez y sus ministros. ¡Abajo la dictadura! ¡Abajo la ilegalidad con todos sus efectos! ¡Viva la Constitución de 1857!”. Aparecía los  jueves y domingos; sólo se publicaron diez números. Bien se puede decir que la mayoría de las notas fueron escritas por Ireneo Paz, lo cual lo convierte en un periódico creado por su pluma. Contaba con cuatro secciones: “Editorial”, “Correspondencia”, “Gacetilla” y “Avisos”. “Correspondencia” a veces llegó a estar ocupada por noticias tomadas de otras publicaciones periódicas que llegaron a San Luis en esos días.

     Los editoriales son lo más interesante, pues en las líneas escritas por Paz se observa su crítica al gobierno juarista. Los títulos revelan este antijuarismo: “¡¡Sangre, muerte y exterminio!!”, “La prensa y la dictadura”, “Beneficios de la presente revolución” y “Progreso de la revolución”.  En el editorial relacionado con la libertad de imprenta, llegó a escribir: “El ataque a la libertad de imprenta es el ataque de nuestra soberanía; el usurpador de estos derechos inmaculados, no tiene otro remedio que someterse al influjo del poder contra quien se ha rebelado. Juárez pues, erige su sepulcro”. [42]


XV. La Revolución (1870)

Fecha de publicación: 21 de septiembre

Lugar: Brownsville, Texas

Sólo se conoce esta publicación —que pretendía criticar al Gobierno juarista— por el comentario de La Revista Universal en su edición del 21 de septiembre: "Don Ireneo Paz, [...] según dice un diario de la frontera, se hará cargo de un periódico con el título de La Revolución".


XVI. El Mensajero (1871)

Fecha de publicación: 2 de enero - 30 de septiembre

Periodicidad: diaria

Lugar: Ciudad de México

Responsable: Pedro García

Impresión: Imprenta J. S. Ponce de León, callejón de Santa Clara, número 6A

Este diario se anunciaba como un "periódico de política, ciencias, literatura y variedades". Entre los colaboradores destacan: Manuel María de Zamacona, Gonzalo Esteva, Roberto Esteva, Braulio C. Picazo, Simón D. García, Justo Sierra, Sabino M. Ramos, Agustín Arévalo, Ireneo Paz, Francisco de Paula Fernández, Juan Ferriz, José M. Cortés, Eleuterio Ávila, Joaquín Villalobos, J. M. del Castillo, Natalia Rocha de Lizardi, Trinidad García, Ignacio Ramírez, Ramón de la Vega, Jesús Alfaro, Juan A. Zambrano, Juan N. Sáenz, Francisco Sosa, entre otros.

     Publicaba anuncios de toda índole: libros, cajones de ropa hecha, agencias publicitarias, jabones carbólicos desinfectantes, escuelas, fotógrafos, médicos, costureras, peluquerías, sastrerías, imprentas, fábricas de puros y productos químicos; también publicitó al ferrocarril México-Tlalpan y México-Tacubaya, la llegada de barcos del Paquete inglés y el Paquete francés, así como la lotería del ferrocarril. Los anuncios se pagaban por adelantado en la agencia ubicada en la calle de la Cadena número 1.


XVII. El Libreto (1875-1876) 

Fecha de publicación: 1875 – 20 de enero de 1876

Periodicidad: irregular

Lugar: Ciudad de México

Impresión: Tipografía del Padre Cobos, 2da. de Vanegas, número 6.

    

Olivia Moreno Gamboa, en “Panorama de la prensa teatral en la Ciudad de México”, apunta sobre esta publicación: 

Tratándose del siglo XIX y de publicaciones especializadas, resulta sorprendente que su frecuencia fuera tan continua. Esto se explica porque dichos órganos tuvieron como principal objetivo dar a conocer a sus lectores los argumentos de las obras que iban a presenciar en el teatro, de ahí que sus editores adoptaran la política de publicarlos precisamente los días en que había función. 

Se podía adquirir desde las 4 de la tarde en el pórtico del Teatro Principal, antes de la función de la ópera. Pero además de venderse fuera o dentro del teatro, debió leerse también allí mismo, entre los entreactos de las obras o durante la función. Y es que no debemos olvidar que incluyó en sus páginas los argumentos de las obras que se representaban en los teatros. 

Tal parece que fue un órgano subvencionado por un teatro. Fundado en 1875 por Ireneo Paz, Adolfo I. Alegría y Clemente Villaseñor, este bisemanario se propuso dar a conocer los argumentos de las óperas que se montaran en el Teatro Principal. Además, se comprometió a publicar las biografías y retratos de los principales artistas de las compañías. Sin embargo, no sabemos si efectivamente llegó a publicar ese material, debido a que no localizamos su primer tomo. Los cinco ejemplares que se conservan del segundo tomo presentan los argumentos de las obras que ofreció la compañía de “zarzuela francesa” (es decir, de ópera bufa) que actuaba en el Teatro Arbeu. [24]    


XVIII. El Combate (1876) 

Fecha de publicación: 30 de enero - 10 de febrero

Periodicidad: bisemanal

Lugar: Ciudad de México

Impresión: Imprenta del Padre Cobos. 2a de Vanegas, número 6

 

El 30 de enero de 1876, La Voz de México publicó: "con este título [El Combate] aparecerá un nuevo periódico de oposición. Lo redactan los Sres. D. Ireneo Paz, Don Enrique Chávarri, Don Manuel M. Romero y D. Guillermo Rivera y Río. Sea bienvenido". Ireneo formó parte del comité de redacción, pero sólo colaboró con dos columnas. La primera apareció en el segundo número bajo el título "Ya es tiempo"; la otra, "El plan revolucionario", en el cuatro.


XIX. El Progreso (1876)

Fecha de publicación: agosto - diciembre

Periodicidad: cada tercer día

Lugar: Brownsville, Texas

Impresión: Imprenta de El Progreso

Propietario: Jesús González Dena

      

Luego de exponer las infracciones constitucionales que Lerdo de Tejada había cometido con su aprehensión, Ireneo Paz fue desterrado a la Habana el 2 de mayo de 1876. No obstante, se instaló en Brownsville, donde, de agosto a diciembre del mismo año, se hizo cargo de El Progreso. El periódico se imprimía en los talleres de Jesús González Dena, amigo suyo. El lema de la publicación —que circulaba desde dos años antes— era: “Periódico independiente, político, literario y de avisos”.

     Ireneo publicó en El Progreso algunos poemas, en los cuales: “Cambia su imagen por la de un hombre amoroso, admirador de las mujeres, pero también refleja su irremediable soledad al sobrevivir en un territorio desconocido”. [25] Asimismo, escribió diversos editoriales en contra de Lerdo y su Gobierno. [26]

     En el número del 15 de diciembre, Ireneo Paz se despidió del público con las siguientes palabras: 

Escribimos hoy las últimas líneas en las columnas del Progreso, que tuvo a bien darnos hospitalidad durante cuatro meses, cuya redacción tenemos el sentimiento de dejar porque ya podemos regresar a nuestros aduares de donde nos arrojó el Sr. Lerdo de Tejada. 

Una vez lanzados de nuestro país por el delito de haber escrito un periódico que no era del agrado del Sr. Lerdo de Tejada, [27] aunque estuviéramos amparados por las leyes que protegen la libertad de la prensa, ocupamos tres meses de nuestro destierro en visitar la Exposición de Philadelphia y las principales poblaciones de los Estados Unidos, viniéndonos en seguida a esta ciudad para ayudar a nuestra causa en la esfera que pudiéramos. Se nos franquearon las columnas del Progreso, entramos a su redacción con placer y durante cuatro meses hemos contribuido con nuestro óbolo a la empresa grandiosa que acaba de triunfar en la República. 

Nos despedimos pues, y no decimos adiós a nuestros lectores, puesto que es probable que sigamos escribiendo alguna otra publicación en la capital, sino simplemente ¡hasta la vista! [28]    


XX. La Patria (1877-1914)

Fecha de publicación: 15 de marzo de 1877 – 26 de agosto de 1914

Periodicidad: diaria

Lugar: Ciudad de México

Impresión: Tipografía de Ireneo Paz

     

La Patria fue, sin duda alguna, la publicación más importante y redituable para Ireneo Paz, tanto económica como políticamente hablando. El periódico —que sustituía a El Padre Cobos— vio la luz el 15 de marzo de 1877. Ireneo se propuso hacer, según explicó en la presentación de su nuevo diario, “una publicación más amplia, que pueda abarcar todas las cuestiones que se agitan, que discuta los principios que ha adoptado la nación para el régimen de su gobierno”. Además, esta vez prometió que la publicación no obedecería a ninguna inclinación por algún partido político, sino que “trataría de los verdaderos intereses de la patria (…) con lo cual queda explicado el porqué del nombre de este diario”.

     Durante el tiempo que se editó, La Patria mudó ocasionalmente su sede. Asimismo, cambió de propietario en dos ocasiones:


OFICINAS                                                                      FECHA DE INICIO                                         FECHA DE FINALIZACIÓN                                    

Primera calle de San Francisco, núm. 13               15 de marzo de 1877                               30 de diciembre de 1878

Escalerillas, núm.  7                                                   31 de diciembre de 1878                         30 de diciembre de 1882

Segunda de Independencia, núm. 2                       1 de enero de 1883                                  20 de diciembre de 1885

Callejón de Santa Clara, núm. 6                              30 de diciembre de 1885                         29 de marzo de 1892

Segunda calle del Reloj, núm. 4                             30 de marzo de 1892                                30 de abril de 1908

Primera de Humboldt, núm. 431 [29]                     1 de mayo de 1908                                   28 de junio de 1908

Puerta falsa Santo Domingo, núm. 5                     29 de junio de 1908                                  21 de julio de 1908

Segunda de San Diego, núm. 15                             22 de julio de 1908                                  25 de noviembre de 1908

Séptima de Mina, núm. 135                                     26 de noviembre de 1908                       25 de diciembre de 1908

Segunda calle del Reloj, núm. 4                              2 de julio de 1909 [30]                              7 de marzo de 1910

Segunda calle del Reloj, núm. 23                            8 de marzo de 1910 [31]                          18 de agosto de 1911 [32]

Tercera de Revillagigedo, núm. 37 [33]                    25 de agosto de 1911 [34]                       11 de agosto de 1913

Segunda de Allende, núm. 42                                   12 de agosto de 1913                              26 de agosto de 1914

Cuarta de Donceles, núm. 89 (Despacho)              9 de septiembre de 1913                        26 de agosto de 1914              

    XXI. La Patria Festiva (1879)

Fecha de publicación: 5 de enero – 26 de agosto

Periodicidad: semanal

Lugar: Ciudad de México

Impresión: oficinas de La Patria, ubicadas en Escalerillas 7   

 

En La Patria Festiva Ireneo Paz adoptó un cariz irónico y, sobre todo, mordaz contra la sociedad y la política de la época. En dicha publicación reunía chistes, caricaturas y notas breves acompañadas de versos satíricos que las complementaban.

     El periódico duró sólo ocho meses y fue sustituido por El Padre Cobos en su cuarta época. En el último número aparece la siguiente justificación:

Como habíamos anunciado a nuestros lectores, con este número cesa La Patria Festiva, y en su lugar sale los domingos La Patria como en los demás días de la semana, con las mejoras que van a introducirse en el próximo septiembre. No siendo justo que los lectores amantes de la trisca y el fandango carezcan de un periódico de caricaturas, tenemos el gusto de anunciar hoy la cuarta época del Padre Cobos, periódico que aparecerá, tan luego como se reúna el número conveniente de pedidos.

    

XXII. La Patria Ilustrada (1883-1896)

Fecha de publicación: 1883 – 29 de junio de 1896

Periodicidad: semanal

Lugar: Ciudad de México

Impresión: Escalerillas 7

 

La Patria Ilustrada fue un semanario especial para los suscriptores de La Patria, en cuyas páginas se publicaban novelas por entrega, ya fueran originales de Ireneo Paz, traducciones de Arturo Paz o colaboraciones especiales, así como poesías y episodios históricos. En esta revista participaron diversos miembros de la familia Paz, como Amalia. Asimismo, José Guadalupe Posada fue su ilustrador entre 1888 y 1890. Las portadas presentaban grabados de personajes de la historia, de la política y de la cultura en México.

    

XXIII. The Mexican Graphic (1884-1885)

Fecha de publicación: 1884 – febrero 1885

Periodicidad: semanal

Lugar: Nueva Orleans

Responsables: Ireneo Paz y Arturo Paz

 

Distribuido durante la Exposición de Nueva Orleans de 1884, fue presentado ante el público y los medios como el único semanario mexicano “escrito en perfecto inglés”; [35] ofrecía una oportunidad inmejorable para anunciar cualquier industria o empresa mexicana con deseos de expandirse a los Estados Unidos. De manera extraoficial, la publicación era una versión en inglés de La Patria Ilustrada, con toques mucho más acentuados de propaganda política. Además del periódico, Arturo también estaba encargado de distribuir una biografía del general Porfirio Díaz editada por Ireneo.

     Para comenzar la distribución de The Mexican Graphic, Arturo recibió ochocientos ejemplares por conducto de su padre. En la carta que anunciaba el envío, Ireneo dio a su hijo instrucciones de entregar ejemplares en los periódicos locales con el objetivo de promocionarlo, así como de distribuirlo en la calle, los puestos y donde fuera posible a un precio de quince centavos por unidad. Resulta curioso que los delegados de la exposición no recibieran indicaciones específicas de qué hacer con el semanario y la biografía. Incluso los encargados de la oficina de asuntos relacionados con la exposición en la Ciudad de México se mostraron extrañados cuando Ireneo acudió a ellos para solicitar la asignación de un quiosco exclusivo para dicho propósito, “pues ese [había sido] cabalmente el objeto de las recomendaciones del Gral. Díaz”. Tal parece que el interés propagandístico era el verdadero móvil del editor, quien, además, en un principio, asumió los gastos de imprenta. Sin embargo, ante las dificultades, el Gobierno auspició la publicación; desafortunadamente, a la postre no consiguió mantenerla a flote, pues hacia febrero de 1885 dejó de imprimirse de manera definitiva.


XXIV. El Reservista (1902)

Fecha de publicación: febrero - diciembre

Periodicidad: semanal

Lugar: Ciudad de México

Responsables: Ireneo Paz y Emilio E. García

Impresión: Imprenta, Litografía y Encuadernación de Ireneo Paz, 2a. del Reloj 4

Era un periódico militar y nacionalista. Fue de gran importancia, especialmente, para los miembros de la Segunda Reserva. Esta publicación pretendía exaltar al Ejército y sus valores patrióticos; también buscaba difundir conocimientos militares dentro de la población. ">[36]


XXV. Arte y Labor (1910-1911)

Fecha de publicación: 1910-1911

Periodicidad: semanal

Lugar: Ciudad de México

Responsable: Ireneo Paz


Se lee en varios números de La Patria entre 1910 y 1911:

Usted que es un intelectual, adorador de las bellas letras y de las pinturas exquisitas, de las crónicas espirituales y frívolas, de la música selecta y de otras mil cosas que satisfacen el espíritu, suscríbase a Arte y Labor, que es la única Revista en la República Mexicana, que trata de estos asuntos.

Oficinas provisionales: 2ª del Reloj, 23.

El Tiempo del 30 de marzo de 1910 dijo en su sexta página:

Nuevo periódico literario. Sabemos que en los primeros días del próximo mes de abril saldrá a la luz pública un nuevo semanal intitulado Arte y Labor, y destinado a tratar asuntos de arte, literarios, teatrales y gráficos. La dirección y redacción del nuevo colega está, según se nos informa, encomendada a un grupo de personas idóneas y entusiastas, y cuenta con la colaboración de plumas cultas y acreditadas, para la parte literaria, así como la dirección de consejeros artísticos reputados para la parte gráfica.

Esperamos al futuro colega y le deseamos, de antemano, un éxito feliz en su labor.

La Patria del 12 de abril de 1910 publicó en su primera página:

Arte y Labor. Un grupo entusiasta de intelectuales ha comenzado a publicar esa revista. El primer número de Arte y Labor semanario ilustrado, promete colocarse en primera línea entre las de su género en la República: El sábado último con motivo de haberse lanzado a la luz este nuevo paladín del intelecto, aquí en nuestras oficinas celebraron los Sres. Marcos E. Becerra, A. Mediz Bolio, Teodomiro Vargas y José Alfaro A. una sencilla fiesta que se prolongó después en la calle de Siete Príncipes número 16, para celebrar la inauguración de los trabajos.

De esperarse es que dados los elementos intelectuales y artísticos con que se cuenta, será Arte y Labor una publicación que honre a la Prensa Mexicana.

El 12 de enero de 1911, se lee en La Patria:

El semanario ilustrado que dirige nuestro Director, y que ha tenido muy buena aceptación, no sólo en los círculos de hombres de letras, sino también en todas las clases de nuestra sociedad, que ya se han acostumbrado a leer prosa escogida y versos exquisitos de poetas nacionales y extranjeros, ha (ilegible) notablemente. Último número es una prueba de ello: artículos, poesías, notas de actualidad, retratos de intelectuales conocidos, clichés de paisajes, todo, en una palabra, que es seleccionado con escrupulosidad, hace interesante la lectura de la revista a que nos referimos en las presentes líneas.

Arte y Labor, repetimos, que de día en día va aumentando en circulación, continuará siendo el periódico del bufete y del hogar, pues entre este semanario ilustrado y los papasales que vuelan por ahí, sin éxito alguno —como que se han constituido en hacer la propaganda de lo más asqueroso y pestilente— hay una enorme, una gran diferencia.

La publicación que edita esta casa, muy en breve dará gratas sorpresas a sus lectores. El poeta Don Ranulfo Penagos, [37] nuevo Secretario de Redacción de Arte y Labor, se tiene en estudio varios proyectos. Dadas las aptitudes y conocimientos que en el moderno periodismo tiene el literato chiapaneco, no dudamos que la revista mejorará notablemente.

Para el 12 de febrero de 1912, La Patria respondió una carta dirigida a Arte y Labor:

Aunque la carta que hemos insertado está dirigida al periódico “Arte y Labor”, que ya no se publica, pero que quizás volverá a editarse, aceptamos la idea para nuestras demás publicaciones…


XXVI. Otras publicaciones

Hay otras publicaciones en las que Ireneo Paz colaboró de las que se tiene constancia por medio de diversos testimonios, pero cuyos ejemplares, sin embargo, no han sido ubicados, por lo que se cuenta con muy poca información acerca de su contenido. [38]

 

En Guadalajara:
  • El Independiente (1857). Según José F. Godoy, Ireneo Paz fundó en compañía de Alfonso Lancaster Jones este periódico “de ideas democráticas”, [39] aunque sólo fue colaborador.

  • Boletín de la Guardia Nacional (1861-¿1862?). De acuerdo con José. F. Godoy, Ireneo "escribió luchando por las leyes de Reforma y la Constitución de 57, los siguientes periódicos: Boletín de la Guardia NacionalLa Revolución, El DíaEl Voto del Pueblo".

  • La Revolución (1861-¿1862?). [40]

En Sinaloa:
  • La Insurrección


  • El Boletín Popular (1867) [41]


En México:
  • El Pegaso 



[1] Celia del Palacio Montiel, Siete regiones de la prensa en México 1792-1950, México, Miguel Ángel Porrúa, 2006, p. 116.

[2]  El Constitucional, 2 de abril de 1862, p. 3.

[3]  El Siglo Diez y Nueve, 13 de mayo de 1862, p. 4.

[4] Ireneo Paz, Algunas campañas, México, Fondo de Cultura Económica, 1997, p. 31.

[5]  El Siglo Diez y Nueve, 3 de noviembre de 1862, p. 3.

[6] Alfonso Fajardo Ponce, "Periodismo Republicano" en Boletín bibliográfico, 15 de julio de 1962, p. 8.

[7] Ibidem.

[8]  Ibidem.

[9] Roberto Huerta Sanmiguel, De mala nota: periodismo del siglo XIX en Colima: compilación, Universidad de Colima, 1988.

[10] Fajardo, op. cit., p. 8.

[11] Del Palacio Montiel, op. cit., p. 117.

[12] Napoleón Rodríguez, Ireneo Paz. Letra y espada liberal, México, Fontamara, 2002, p. 45.

[13] Paz, op. cit., p. 146.

[14] Milenka Flores, ¿Lenguaje subversivo en la poesía satírica en Hispanoamérica?: El caso de Ireneo Paz (1836-1924), Universidad Veracruzana.

[15] Doralicia Carmona Dávila, Memoria Política de México.

[16] Rodríguez, op. cit., p. 49.

[17] La Patria, 27 de agosto de 1910, p. 7. 

[18] El Siglo Diez y Nueve, 19 de junio de 1868.

[19] Antonia Pi-Suñer Llorens, “Entre la historia y la novela. Ireneo Paz”, op. cit., p. 383.

[20] “A última hora”, El Padre Cobos, tomo 1, número 35, 20 de junio de 1869, p. 4.

[21] Escultor y caricaturista (1840-1907), autor de las estatuas de los Indios Verdes en 1890.

[22] Rodríguez, op. cit., p. 51.

[23] Martín Sánchez, Seres míticos y personajes fantásticos españoles, Madrid, Editorial Edaf, 2002, p. 529. Véase también: Juan Eugenio Hartzenbusch, “Fábula XVII. Las indirectas del padre Cobos” en Cuentos y fábulas, tomo II, Imprenta y Estereotipia de M. Rivadeneira, 1862, p. 210.

[24] Olivia Moreno Gamboa, “Panorama de la prensa teatral en la ciudad de México” en Boletín del Instituto de Investigaciones Bibliográficas, volumen XI, números 1-2, México, Universidad Nacional Autónoma de México, 2006.

[25] Marte R. Gómez y Francisco Aguirre, Ensayo tamaulipeco del siglo XX, México, Instituto Tamaulipeco para la Cultura y las Artes, 2000, p. 197.

[26] Catálogo de documentos-carta de la Colección de Porfirio Díaz, marzo 1876-noviembre 1885: tesis, volumen 3, México, Universidad Autónoma de Tamaulipas, 2000, p. 38.

[27] Se refiere a El Padre Cobos.

[28] Ireneo Paz, “Despedida” en El Progreso, Brownsville, 15 de diciembre de 1876, p. 2.

[29] En esta fecha el periódico lo adquiere Emeterio de la Garza Jr.: “Hemos adquirido el periódico La Patria para restaurarlo en su antiguo prestigio, mejorarlo y ampliarlo. La Patria tendrá próximamente imprenta, prensas, linotipos y rotativas propias, tirará quince mil ejemplares diarios, con ocho páginas, servicio telegráfico y cablegráfico oportuno, universal y exclusivo, información nutrida y variada y procurará servir bien y satisfacer a sus lectores. La Patria aparecerá todos los días a las 5 a. m. La Dirección, Redacción y Administración de La Patria han quedado establecidas en la casa N° 431 de la 1ª calle de Humboldt”. La Patria, 30 de abril de 1908.

[30] La dirección de Emeterio de la Garza concluyó el 25 de diciembre de 1908 con el número doscientos diez de la segunda época. El periódico no se vuelve a publicar sino hasta el 2 de julio de 1909, con Ireneo Paz como propietario. La continuidad de la publicación se retoma en el número 9406.

[31] Parece ser que en este tiempo cambió la numeración de la calle del Reloj. Ireneo no anunció ningún cambio de domicilio de las oficinas o la imprenta.

[32] Del 1 al 23 de mayo de 1911, Arturo Paz asumió la dirección política de La Patria; Octavio Paz (padre del poeta) quedó como gerente. Posteriormente, Ireneo retomó el cargo.

[33] En el inventario de los bienes de Rosa Solórzano contenido en su testamento, aparece como un pasivo el inmueble de la tercera Revillagigedo 73 (37, según La Patria), el cual se había convertido en un crédito en litigio “que tiene Felipe Martel en contra de la sociedad, por rentas insolutas de la casa N° 73 de la 3ª calle de Revillagigedo de la ciudad de México, según consta en el instructivo del Juzgado Sexto de lo Civil que conoce del negocio en la vía sumaria”. Testamento de Rosa Solórzano de Paz, sección segunda, 8 de mayo de 1916, folio 228427.

[34] “Con motivo de la mudanza de nuestros talleres, no pudimos publicar La Patria en estos días pasados. Habíamos tomado las precauciones necesarias para que sólo el sábado de la semana anterior no se publicara el número de ese día; pero dificultades imprevistas como la conexión de la fuerza motriz que no se hizo pronto según habíamos arreglado y el haberse roto una prensa, hacen que hasta ahora nos encontremos en condición de continuar nuestro trabajo que van a ser en lo sucesivo de muy grande importancia política con motivo de la lucha electoral en la que vamos a tomar parte de un modo resuelto”. La Patria, 25 de agosto de 1911, p. 1.

[35] Ireneo Paz, “The Mexican Graphic” en La Patria, 15 de noviembre de 1883, p. 2.

[36] "El Reservista. Periódico Militar" en El Contemporáneo, 2 de febrero de 1902, p. 1.

[37] Ocosingo, Chiapas, 1889 - Ciudad de México, 1946. Jefe de redacción de La Patria. Director de Arte y labor y Chiapas nuevo. Corresponsal de El Universal, El Demócrata, Excélsior y El Pueblo durante la Revolución. Fundó el Semanario Soconusco.

[38] Las publicaciones que se enlistan aparecen en la obra de Napoleón Rodríguez. Se añaden otras fuentes que también las mencionan.

[39] Rodríguez, op. cit., p. 49.

[40] Véase la nota anterior.

[41] Véase la carta de Ireneo Paz a Apolonio Angulo, publicada el 19 de junio de 1868 en El Siglo Diez y Nueve.

[42] (La Nueva Era, número 8, 6 de febrero de 1870). 



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